Vía: www.laopinion.es
El portavoz del PSC anuncia que pondrá en manos del Constitucional las últimas medidas
DANIEL MILLET | SANTA CRUZ DE TENERIFE
El Parlamento de Canarias está alcanzando en los últimos meses unos niveles de degradación inimaginables e insostenibles, una grave deriva legislativa sin precedentes". Santiago Pérez, portavoz del Grupo Parlamentario Socialista, anunció ayer que su partido va a poner en manos del Tribunal Constitucional la forma en la que los partidos que forman el pacto, CC y PP, han sacado adelante cinco enmiendas a la modificación de la Ley de Ordenación del Turismo, que "nada tienen que ver con la materia que regula esta proposición de ley". "Las enmiendas vulneran los mínimos controles legislativos y se suman a los otros retrocesos que vienen protagonizando las formaciones que sustentan el pacto", puntualizó Pérez.
El vocero del PSC se refería así a las disposiciones adicionales introducidas en las modificaciones a la ordenación turística aprobadas que implican la legalización de instalaciones turísticas en suelo rústico en La Gomera, La Palma y El Hierro, así como la concesión de permisos transitorios a farmacias afectadas por una suspensión cautelar de la Justicia y otra medida para las empresas de alquiler de vehículos. "Se han aprobado unas enmiendas que merecían cada una un rango superior y que no tienen que ver con la naturaleza de la ley en que se han insertado, burlando las mínimas garantías legislativas y obstaculizando la legítima labor de la oposición. Se está defraudando el interés general y el PSC no lo va a permitir bajo ningún concepto", refirió Santiago Pérez.
Los socialistas están de acuerdo con que "se busquen alternativas para las islas menores", pero no con que "se haga sin que se cumplan una serie de garantías vitales para el interés general". "Por ejemplo, en lo que respecta a la legalización de unos 4.000 hoteles rurales, una estimación que ha dado la propia diputada nacionalista Belén Allende, ¿cuántas instalaciones exactamente van a verse beneficiadas? ¿Qué intereses privados van a salir ganando?". "Si se hubiera resuelto a través de un proyecto de ley", precisó ayer Santiago Pérez en rueda de prensa, "todos estos datos habrían figurado en el expediente, pero al hacerlo como enmienda no se especifican estos detalles claves. Porque, ¿qué ocurre con las instalaciones rurales que estaban legalizadas? ¿No es un agravio comparativo? ¿Se premia a los que no cumplen y se castiga a los que cumplen? Lo han denunciado las mismas organizaciones empresariales turísticas".
Los progresistas denunciaron que el Gobierno y sus socios parlamentarios "han derogado" de soslayo la moratoria turística, que "tanto debate y tanto consenso político y social precisó en su momento". Y se ha derogado "dando la espalda a todo ese consenso" a través, según Santiago Pérez, de dos leyes: la de Medidas Urgentes, "con la que se elimina el crecimiento cero de la planta alojativa", y la modificación de la Ley de Ordenación del Turismo de Canarias, "con la eliminación de las autorizaciones previas para las instalaciones turísticas". "Y todo se ha hecho sin debate, a espaldas de los ciudadanos", matizó.
"El Parlamento de Canarias está actuando como los ayuntamientos de peor categoría, a base de alcaldadas, de impulsos caciquiles y de golpes de mando que van a tener serias consecuencias", se quejó Santiago Pérez, que recordó el doble rasero de la Mesa del Parlamento al admitir unas enmiendas en una ley –la de Ordenación del Turismo– que se sale de sus contenidos, cuando en 2007 aplicó una doctrina opuesta en una medida impulsada por los socialistas. Ese año, la Mesa rechazó unas enmiendas al proyecto de ley de modificación de las elecciones al Parlamento de Canarias porque "no tenían congruencia ni homogeneidad" a tenor de "lo establecido por la jurisprudencia del Tribunal Constitucional".
El portavoz socialista también citó como ejemplo de esta "deriva gravísima" la modificación del Catálogo de Especies Protegidas de Canarias. "Es una medida que impulsa el Gobierno, pero que ha derivado al grupo parlamentario de CC para que la planteara como proposición de ley, con lo que burla los controles necesarios", dijo Santiago Pérez, para añadir que "para colmo, ahora han pedido habilitar el mes de enero, no hábil parlamentariamente, para desarrollar esta modificación, intentando darle carpetazo a espaldas de los ciudadanos".
El pleno más corto de la historia
Cuatro minutos y un segundo. Ése fue el tiempo que duró ayer el pleno más corto jamás celebrado en el Parlamento de Canarias. El enfado en las filas coalicioneras y populares era ostensible por tener los diputados que acudir el día después de Navidad a la sede santacrucera de Teobaldo Power para cumplir el trámite extraordinario de la aprobación de las cinco polémicas enmiendas introducidas en la modificación de la Ley de Ordenación de Turismo de Canarias, el cuerpo legislativo que ya había sido aprobado el pasado miércoles en pleno ordinario.
La votación de estas disposiciones adicionales se pospuso a ayer después de que los tres parlamentarios gomeros del PSC –Julio Cruz, María Herrera y Guadalupe Jerez– se acogieran al derecho que les confiere el Estatuto de Autonomía para vetar aquellas enmiendas que considerasen lesivas para su circunscripción, siempre que fueran más de dos tercios de la representación de la Isla. Muchas de sus señorías aparecieron en vaqueros y los de fuera de Tenerife tuvieron que tomar el avión para sentarse, votar las cinco enmiendas, votar el título de las modificaciones a la Ley de Ordenación del Turismo y la exposición de motivos (en ambos casos se impuso el sí de CC y PP contra el no de la oposición socialista por 29 a 17), y abandonar la Cámara con la misma.
"Esto es lamentable", "vaya ganas de molestar", "qué fastidio tener que venir para esto cuando se pudo resolver el pasado miércoles" fueron las frases más comentadas en los pasillos por nacionalistas y populares. El pleno extraordinario supuso un gasto extra, aunque todos los diputados del PSC presentaron un escrito renunciando a las dietas. Algunos parlamentarios de CC y PP también habían anunciado que iban a hacer lo mismo, pero sus escritos todavía no habían sido elevados, aunque matizaron que lo iban a hacer.
