Vía: www.canariasahora.es
Hizo bien Coalición Canaria en encargar a José Miguel González la defensa de la ley del Catálogo de especies. Cuando ayer subió a la tribuna el escribano de las mentiras de las conclusiones de la comisión parlamentaria del caso eólico, uno de los parlamentarios (junto con Manuel Fernández, mano derechísima de Soria) que vive de la política y la empresa privada (mezcladas) desde la época de la dictadura. González fue el máximo representante el Canarias del Ministerio de Obras Públicas en la época del estado centralista, antes de la Constitución, así que podemos imaginarnos la vocación medioambiental, nacionalista y democrática de este fundador de ATI. Era el mejor candidato para defender una ley que ha ignorado a la comunidad científica, a los técnicos de la consejería de Medioambiente, a los colegios profesionales, algunos cabildos...La democracia restringida a un clan al servicio de los especuladores de siempre.
Los representantes de la patronal de la construcción tinerfeña en el Parlamento cumplieron ayer su último encargo, aprobar la ley del catálogo de especies que recorta la protección de la biodiversidad canaria justo tres días antes de la celebración del día internacional de la Biodiversidad. Siempre tan oportunos ellos. Pero la más oportuna de todas fue mi admirada Cristina Tavío. La líder del PP de Tenerife tuvo un ataque de sinceridad en el pasillo del Parlamento y declaró a los periodistas que “Es una buena noticia que hoy en Canarias haya una Ley que venga a determinar con mayor claridad lo que está en peligro de extinción y lo que no lo está para que nunca más se frene la actividad económica con la excusa de una especie que no está en extinción”. Tavío confirmó lo que han denunciado los colectivos ecologistas y la comunidad científica, que el nuevo Catálogo de Especies se ha hecho con un objetivo concreto: quitar los impedimentos legales que han paralizado, por orden judicial, las obras del puerto de Granadilla.
La diputada del PP ya nos demostró en su día su conocimiento de las especies endémicas protegidas. Recordemos aquella tertulia televisiva que compartió con la concejala de Urbanismo de Santa Cruz de Tenerife. Para que el pueblo llano entendiera Luz Reverón dijo que “los sebadales, ¿qué son los sebadales?, cuando una ola te revuelca y te araña, lo que te araña son los sebadales”, tras la importante aportación científica de la edil chicharrera la lideresa del PP remató diciendo: “además hay un instituto que estudia las algas y ha descubierto que hay algas venenosas”. Domingo Berriel no nos ha desvelado todavía qué científicos respaldan la ley aprobada ayer por CC y el PP, pero estoy convencido de que estas dos aportaciones de Luz Reverón y Cristina Tavío fueron determinantes para realizar el nuevo catálogo.
Otra aportación nos la hacía ayer la parlamentaria de CC Dulce Xerach. En una entrada en su blog donde ponía a parir a quienes se manifiestan frente al parlamento escribía: ““Aún no he votado, pero tengo un argumento sólido: esas especies incluidas en el catálogo merecen protección mediante ley. Otro argumento: no me fío del Estado y su decreto. Conocen Canarias mucho peor que nosotros. Otro argumento: me fío de los técnicos de la Consejería de Medio Ambiente”. Tres argumentos que son tres mentiras: el catálogo que incluye la ley recorta el número de especies protegidas, los propios compañeros de Xerach, el propio José Miguel González, dijo ayer que el catálogo lo hacen porque lo pide el Estado y los técnicos de la consejería de Medio Ambiente publicaron un comunicado donde dejaban claro que no les habían consultado a ellos.
El director del Jardín Botánico Viera y Clavijo, David Branwell, declaró hace unos días que este nuevo catálogo pone en peligro buena parte de la biodiversidad canaria. Según el reconocido científico "hay un problema y es que tenemos algunas personas que se han metido en la política cuyo único interés en un especio verde son los noventa y pico centímetros cuadrados de un billete de cien euros. Y creo que este es el problema que tenemos." Se equivoca Branwell. Se nota que no se ha leído los sumarios de los casosFaycán, Unión, Góndola... No les interesa el espacio verde de los 100 euros, sino el espacio lila de los billetes de 500 euros, que son los que se usan para pagar las campañas electorales fuera de la legalidad. Esos billetes, conocidos como Bin Laden porque todos los nombran pero nadie reconoce que los ha visto, esos billetes pertenecen a la especie no endémica que sale más protegida con la ley aprobada ayer en el Parlamento canario.
PD: El Día, el periódico más influyente en la clase política tinerfeña, resume en su portada de hoy las intenciones de la ley "El catálogo de especies da luz verde al puerto de Granadilla. El Parlamento canario eliminó ayer el último obstáculo". Gracias don Pepito por su sinceridad. Se lo digo desde este periódico que usted quiere cerrar.
