miércoles, 26 de febrero de 2014

El bosque más antiguo de Tenerife revela nuevas especies a los científicos

Vía: efeverde.com

El investigador del CSIC Brent Emerson lidera un estudio internacional sobre biodiversidad en bosques de Canarias, Azores y La Reunión que, entre otros datos, ha revelado la composición de la fauna invertebrada y, para su sorpresa, 169 nuevos registros de especies de coleópteros y dos de arañas en Anaga.
Ana Santana, Santa Cruz de Tenerife.
Este es el enclave tinerfeño donde pervive la mejor representación de vegetación del terciario, la laurisilva, explica a Efe Brent Emerson, quien coordina el proyecto denominado “Comprender la dinámica de la biodiversidad en islas tropicales y subtropicales para ayudar a la estrategia de conservación”.
El proyecto está financiado por la Unión Europea con la colaboración del Gobierno canario y tiene seis socios de los tres países participantes, España, Francia y Portugal.
Brent Emerson, que es investigador del Grupo de Ecología y Evolución en Islas del Consejo Superior de Investigaciones Científicas en La Laguna, señala que el proyecto se desarrolla en Tenerife, La Reunión y la isla de Terceira en Azores y en cada una de ellas se hace un muestreo “sistemático y replicado” en el que se combinan métodos tradicionales de muestro con estudios genéticos.
La idea es estudiar la diversidad de plantas e invertebrados que habitan en estos bosques para responder a preguntas como cuántas especies viven en ellos y cómo se estructuran especialmente, pues el objetivo es tener datos útiles para el mantenimiento y la gestión de estos espacios.

La cantidad de invertebrados es abrumadora

En el caso de Anaga, explica Brent Emerson, la cantidad de invertebrados endémicos que se encuentra “es abrumadora” en comparación con bosques continentales, que son mucho más extensos geográficamente.
La mayoría de especies de invertebrados que habitan en Anaga son endémicas, lo que quizás se deba a la “antigüedad” de este bosque y al aislamiento de su fauna, que ha sobrevivido a los sucesivos cambios climáticos de origen natural.
Si estas especies están muy “localizadas” en un área del bosque serán más frágiles y vulnerables, y un objetivo del proyecto es obtener datos sobre la vulnerabilidad de estas especies.
En el muestreo realizado en Anaga se han inventariado 169 especies de coleópteros, y casi todos son nativos del lugar, lo que supone “una buena señal” de que no hay tantas especies introducidas.
Ahora los investigadores están analizando las arañas del muestreo y ya han encontrado dos especies nuevas del genero Dysdera, que “da idea de cuántas especies de arañas quedan todavía por descubrir” en este bosque.

Laboratorios naturales

El bosque de Anaga resulta “un laboratorio natural” para estudiar cómo se realiza el “ensamblaje” de especies, y en el futuro lo ideal sería hacer una investigación parecida en otros laboratorios naturales, como la laurisilva de Teno, también en Tenerife, y en los bosques de laurisilva de La Palma, La Gomera y El Hierro, para investigar si el ensamblaje de invertebrados en cada isla ha resultado o no según patrones iguales.
Como ejemplo Emerson indica que en Anaga el escarabajo más abundante es del género Heterotemna que no existe en La Gomera, y entonces cabe preguntarse “si no hay otra especie que desempeña en esta isla su función, ¿que consecuencias tendrá?”

Trampas de caída

Los investigadores han establecido diez parcelas de estudio de 50 por 50 metros y se han realizado varios tipos de muestreo en cada una, como la colocación de trampas de caída, y la extracción de invertebrados de la hojarasca.
Para cada especie en cada parcela se escogen cuatro ejemplares para secuenciar un gen mitocondrial, y con el marcador genético y el muestreo geográfico se están relacionando las diferencias genéticas entre individuos de cada especie con su probabilidad de dispersión.
Así se puede estimar si la distribución de cada especie dentro de los bosques es una consecuencia de su capacidad de dispersión.
Comparado con Anaga, el bosque de Terceira, en Azores, tiene menos riqueza de especies, especialmente de invertebrados, mientras que el bosque tropical de La Reunión tiene más diversidad de árboles que la laurisilva de Anaga.
Pero a pesar de que el bosque de La Reunión tiene más especies de plantas, la cantidad de especies de invertebrados que habitan en el bosque no supera a Anaga, y por ahora parece que la biomasa de invertebrados en la Reunión es menor que en la laurisilva de Anaga.

La edad del bosque, clave

Un detalle que podría ser clave para explicar la alta biodiversidad de Anaga es la edad de su bosque y, según Brent Emerson, “algunos datos genéticos preliminares indican que ha habido bosque de laurisilva en Anaga desde hace al menos varios millones de años. Desde mi punto de vista, es un área de importancia nacional e internacional debido a su legado evolutivo y ecológico”.
Por ello resultan “muy interesantes” los datos referentes al bosque en Anaga, que tiene en proporción más especies de coleópteros y de arañas que Reunión, y ahora los científicos quieren profundizar los trabajos en cada región e incluso compararlos con Hawai, donde otro grupo de investigación está aplicando la misma metodología.

sábado, 22 de febrero de 2014

El timo del acercamiento al mar

Los mismos empresarios que tienen intereses en los espacios que puertos va dejando libres en Santa Cruz aparecen también en Granadilla.

Durante años ha sido el proyecto político y urbanístico más importante de Santa Cruz: acercar la ciudad al mar del que se mantiene alejada por la construcción desmesurada del puerto a lo largo de sus doce kilómetros de costa. Sin embargo, tras lo que se ha vendido como un loable intento de hacer una capital más habitable en realidad parece esconderse un suculento negocio.
Según las investigaciones desarrolladas por la policía judicial en la Operación Lavandera que estudia todo lo ocurrido con las inversiones del Fórum Filatélico en Tenerife, la estrategia de acercar Santa Cruz al mar no se basa tanto en razones de sostenibilidad urbanística sino con el fin de centrar las inversiones en el puerto de Granadilla. Por si fuera poco prácticamente los mismos nombres que están detrás de los proyectos que pretenden morder espacios portuarios a favor de la ciudad se encuentran también en los del sur de la Isla.
Lo cierto es que durante los últimos años Santa Cruz ha visto como el puerto ha ido cediendo paulatinamente terrenos con un digusto que tal vez es más aparente que real. Desde 1995 se ha construido el Parque Marítimo, el Palmétum, se ha procedido a la recalificación de la explanada de aparcamientos frente a la plaza de España, se proyecta una marina en la Dársena de Los Llanos, la remodelación del muelle de Enlace y se planifica un puerto deportivo en San Andrés, precisamente una de las inversiones de Fórum Filatélico. Casi todas iniciativas impecables y perfectamente vendibles ante la opinión pública. Exactamente igual que la compra del frente de la playa de Las Teresitas para que no pudiera albergar construcción alguna. Pero en el fondo, al menos de este último caso, ya ha quedado claro que las intenciones no eran ni de lejos tan loables ni mucho menos estaban basadas en el interés general.
Varios confidentes anónimos consultados por los investigadores de la Operación Lavandera, relataron los distintos proyectos que se pensaban ejecutar y detrás de los cuales aparecen los nombres redundantes de la sociedad chicharrera. En el caso de Antonio Plasencia, por ejemplo, se le atribuyen intereses en Santa Cruz y la propiedad de casi doscientas hectáreas en los alrededores del puerto de Granadilla. Incluso se llega a apuntar que el empresario dispuso de una posible información privilegiada para planificar con tiempo la compra de estos terrenos y su revalorización. De esta manera las fortunas de mayor renombre de la Isla consiguen un doble premio: inversiones en los espacios que puertos va liberando en la capital tinerfeña y a la vez también en Granadilla. Una jugada perfecta



sábado, 15 de febrero de 2014

Gobierno CC–PSOE: Un pacto nefasto para el medio ambiente

Ben Magec–Ecologistas en Acción denuncia el bloqueo y la falta de operatividad a la que se está viendo sometido el área de Medio Ambiente del Gobierno de Canarias, con las consecuencias que ello conlleva sobre la conservación del territorio y la biodiversidad. Señalan al pacto de gobierno entre Coalición Canaria y Partido Socialista como el origen de este “dislate”, dado que las negociaciones para este pacto dieron lugar a un “organigrama incomprensible desde el punto de vista de la conservación”. Añaden que los principales responsables en materia de conservación del medio ambiente, José Miguel Pérez, y del territorio, Domingo Berriel, “están haciendo dejación de funciones en materia medioambiental”. El resultado de esta estructura orgánica más el desinterés y el bloqueo al que se está sometiendo a la Viceconsejería de Medio Ambiente está suponiendo “la paralización de las actividades de esta área, y el incumplimiento de compromisos electorales del partido socialista tan reiterados como la modificación del Catálogo de Especies Protegidas de Canarias”.

La Federación ecologista señala que “el medio ambiente canario está atravesando por sus momentos de mayor desprotección. El Catálogo de Especies Protegidas ha puesto en jaque a la mayoría de especies amenazadas de Canarias, y tras la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Canarias quedan desprotegidas la mayoría de zonas que conforman la Red canaria de Espacios Naturales Protegidos. Los Parques Nacionales están pasando irremediablemente a manos de los Cabildos, con lo que aumenta la influenciabilidad de sus gestores, y la descoordinación en la Red. La única razón por la que no se visibiliza esta situación en este momento es la crisis, que ha puesto freno momentáneamente a la construcción inmobiliaria y de infraestructuras”. Añaden que “por otro lado, la Viceconsejería se está centrando únicamente en escapar de sanciones europeas a su propia inoperatividad, y no está haciendo nada por solucionar esta situación de amenaza, ni por afrontar sus competencias como máximo órgano responsable de la conservación del medio ambiente”.
Las causas de esta situación son claras, según Ecologistas en Acción. “Todo esto es el fruto de años de desgobierno de Domingo Berriel al frente de la Consejería de Medio Ambiente, y se mantiene por la falta de interés del Consejero Miguel Pérez hacia los asuntos que son responsabilidad de su área, que se ve claramente en su falta de criterio y de compromiso. Un ejemplo claro de esta situación se dio cuando se presentó el recurso canario a la Ley de Costas, frente al que no hizo ningún tipo de declaración”.
Es de destacar que además, incomprensiblemente, las competencias de los temas vinculados a la ordenación y la gestión del territorio están de manos de Domingo Berriel, quien además asume las funciones de Consejero de Infraestructuras, “que es el campo en el que más se ha prodigado históricamente”. De esta manera, desde la Viceconsejería de Medio Ambiente no se puede hacer frente a cuestiones tan importantes como la situación de la Red Canaria de EENNPP y su indefinición jurídica, y desde la Consejería de Ordenación del Territorio tampoco hay interés en afrontarlo.
Por otra parte, las competencias relacionadas con biodiversidad corren a cargo de una Consejería que también asume la Educación. De esta manera, se crea un “disparate administrativo” en el que los temas ambientales han quedado relegados a un segundo plano, con una complejidad burocrática aún mayor que la que ya existe normalmente en la administración y retrasos derivados de la falta de interés generalizado hacia los temas ambientales.
Este desinterés conjunto se refleja claramente en la falta de presupuesto, que resta aún más operatividad a la Consejería. De esta manera, la gestión en materia de medio ambiente sólo puede ser llevada a cabo por el funcionariado que ya está ocupado en solucionar esos problemas históricos de desgobierno, y el trabajo de gestión es casi inexistente.
Y por supuesto, la participación ciudadana se ha convertido en la última de las prioridades”, afirman, puesto que órganos de participación ciudadana como el Observatorio de Desarrollo Sostenible o el Consejo Canario de Residuos ya no se convocan.
Por último, Ben Magec-Ecologistas en Acción señala que “la Viceconsejera de Medio Ambiente, Guacimara Medina, no está siendo capaz de situar al medio ambiente en la agenda política del Gobierno. No consigue respuestas de la Consejería de Ordenación Territorial, ni el apoyo real de su propio partido”.
Ecologistas en Acción recuerda que “el PSOE se presentó a las elecciones autonómicas abanderando la promesa de cambiar el Catálogo de Especies Protegidas como tarea prioritaria. No sólo ganaron, sino que además asumieron competencias plenas en esta materia. Ahora no sirven excusas de ningún tipo para justificar que, tras dos años de gobierno, no haya voluntad real para que las especies amenazadas de Canarias sigan siendo víctimas de una Ley supuestamente denostada por el que ahora es partido de gobierno”.